Siempre termino en el mismo lugar. Donde termina, comienza de nuevo. Un círculo interminable. Camino y camino, con un rumbo fijo, pero llego siempre al mismo lugar.
Mi peinado va cambiando, mi ropa también, mi cuerpo me acompaña en los cambios. El tiempo pasa y yo aunque cambio, sigo en el mismo recorrido.
La gente a mi alrededor cambia, pero son todas iguales. Cada vez que es algo nuevo, emocionante y abrumador, termina en lo mismo de siempre, en el círculo sin fin.
Todo es igual, solo que en diferentes formas y tamaños. Todo es igual, solo que en diferentes tiempos y días. Todo es igual, hasta yo.
Quisiera algún día poder salir de este círculo vicioso, encontrarle una línea de fuga invisible, para poder escaparme a través de ella, dejando a las personas atrás, dejando el mismo paisaje que no es más que una falsa escenografía, dejando el tiempo inmóvil.
Una vez que de el primer paso fuera del círculo, el reloj volverá a correr, y la vida será vida. Comenzaré a vivir el presente, lleno de color y alegría.
Pero todavía me queda tramo por recorrer en este gris círculo, aunque cambie, continúo acá.